Juan y Javi viajaban en una caravana de pueblo en pueblo llevando dentro una carpa de circo.
Cada semana, cambiaban de lugar, y de paso a sus gentes. ¡Literalmente!... pues su atracción, única en el mundo, consistía en eso.
Bilbo Bolsón fue de niño un hobbit atípico, que se salía de los estándares de normalidad de la Comarca por su curiosidad, inquietud y espíritu travieso, pero se aposentó con la edad. Gandalf se lo encontró sentado a la fresca, a la entrada de su madriguera, fumando una pipa tranquilamente, haciendo tiempo entre una comida y otra, deseoso de noticias y comentarios del exterior sin necesidad de experimentarlo de primera mano. Alguien que define las aventuras como «¡cosas desagradables, molestas e incómodas que retrasan la cena!».
La definición de dignidad hace referencia al derecho de una persona a ser valorada, respetada y tratada éticamente, igualmente al valor inherente a cada ser humano concreto por el simple hecho de serlo, en cuanto ser dotado de libertad.
Cuando observo a una persona mayor percibo más que un físico, veo a una enciclopedia ambulante y aun baúl de experiencias.
Las nuevas tecnologías nos han cambiado la vida. Día a día nos facilitan el acceso a un mundo desconocido y numerosas prestaciones en el ámbito de la comunicación. Obviamos lo negativo hasta que no nos afecta. Ahora mismo, según consta en varios informes médicos, ya existen numerosos jóvenes afectados por patologías relacionadas con el uso abusivo de los móviles y las redes sociales. Entre otras:
Whatsappitis
Dolor de los pulgares, hinchazón y entumecimiento de los mismos, provocado por teclear el móvil de forma compulsiva.
