Esa es la cuestión.
Para la salud mental lo mejor es la FLEXIBILIDAD.
La rigidez cognitiva nos puede llevar a una vida muy infeliz. Me refiero a la rigidez cognitiva que tiene que ver con un estilo de personalidad, a veces, la rigidez va más allá y pasa a ser un rasgo típico de ciertos trastornos.
¿Qué es la rigidez cognitiva como estilo de personalidad?
Pues no admitir otras perspectivas, negarnos a los cambios, no atender ni valorar otros puntos de vista, ni hacer uso de una mente más abierta. Todo esto acaba produciéndonos sufrimiento y frustración.
En estos años he observado un denominador común, en la gente que más sufre y es un alto grado de rigidez cognitiva.
¿Y cómo podemos ser más flexibles cognitivamente?
1° Entender que la flexibilidad mental es esencial para una vida sana, para afrontar dificultades y para disfrutar de unas relaciones sociales más felices.
2° Vivir en el presente con las novedades que este trae, no en nuestro particular escenario mental "donde todas las ventanas están cerradas".
3° Aprender a tolerar la incertidumbre. Aceptar que nuestro mundo se rige por la imprevisibilidad. Adaptarnos a los cambios y reaccionar de manera creativa, original y flexible.
Hay que aprender a ser junco. Su flexibilidad le permite adaptarse al viento, a los cambios...