
Hace unas semanas escuché en un período de pocos días la palabra cernícalo.
Los escenarios en los que esa palabra llegó a mis oídos fueron dos totalmente distintos pero en apariencia con un mismo significado.
Las personas que utilizaron la palabra cernícalo lo hicieron con una connotación despectiva, como intentando definir a una persona que carece de sentido común, de dos dedos de frente, o vulgarmente que son un@s burr@s e incluso, preguntando a una de esas personas me ha dicho que para ella la palabra cernícalo se define como una persona con falta de higiene.
Como mi atención auditiva durante esos días captaba la palabra por todos lados, decidí investigar un poco sobre esta ave para saber si mi primera impresión era la que había entendido.
No más lejos de la realidad, la característica principal de este animal es lo hábil que es para mantenerse en un mismo lugar mientras está volando con la finalidad de poder ubicar de forma más exacta a su presa. Cuando vuela lo hace de una forma muy acrobática.
Tras darme cuenta de la contrariedad con la que en un principio éstas personas utilizaban la palabra cernícalo y lo que realmente son estas aves, decidí darle el giro “Kos”
No puedo evitar en pensar en las personas cernícalas con las que me he ido, voy a iré cruzando a lo largo de mi vida.
Personas que en un principio pueden parecer despistad@s, que no dan pie con bola, que van a salto de mata y que no ven más allá de sus propias narices. Esto, en apariencia claro.
Rascando un poco más también me doy cuenta de que este tipo de personas son más avispadas de lo que en un principio parecen, revolotean, observan con aparente impaciencia, fichan a su objetivo, moviéndose con rapidez … y van a por su presa. Creo que hay que ser bastante astuto para llegar a este punto.
En ambos casos, este tipo de actitudes me molestan bastante. Una por exceso de posicionamiento y la otra por ser carente (aparentemente) de posicionarse.
Como no puedo evitar dar un paso más acerca de esto me pregunto si somos capaces de auto observarnos a nosotr@s mism@s los suficiente para caer en la cuenta de cuando nos comportamos como unos cernícalos, aparentemente yendo sin criterio alguno por la vida o caminando como unos impulsivos sin mirar a nuestro alrededor, solo teniendo la mirada fija en el objetivo, sin escuchar el entorno, a las personas que nos rodean, en definitiva al mundo.
¿Eres capaz de verte en esto?
Seas el tipo de cernícalo que seas, o la actitud cernícala que cojas en determinadas situaciones, date el permiso de reconocer, acoger, abrazar y aceptar esa parte de ti mismo para que viviendo en consciencia juegue a tú favor y haga el menor daño posible a los demás. Siendo así mismo, la mejor versión de tu cernícalo interior.