Reflexiones
ISPE
En un breve espacio de tiempo se me han acumulado las celebraciones, por una parte el cumpleaños de un muy longevo familiar mio, el regreso de una amiga tras largo tiempo de estancia en el extranjero y la inauguración de un negocio por parte de un vecino y amigo.
Han sido muy diferentes, la del familiar en plan íntimo, en su casa, acompañado de sus seres queridos, con globos, tarta, álbum recopilatorio de fotos y un menú un poco cuidado, ya que la edad de alguno de los presentes lo aconsejaba. El regreso de la amiga ha tenido otro color, gente mas o menos joven, comida contundente, algún detalle y dosis de bailoteo y copillas. Lo del negocio ha tenido otro corte, había alguna autoridad, prensa, fotógrafos, discurso explicando el proyecto y como no, esos canapés y vino español imprescindibles en este tipo de eventos.
Eran situaciones distintas que necesitaban una fiesta acorde con ellas, era exteriorizar lo que se sentían sus participantes.
Y es que las celebraciones tienen un trasfondo distinto al de las fiestas que las dotan de un gusto especial, tienen un plus en satisfacción personal.
Ahora que aun estamos en las fechas navideñas siempre me planteo la diferencia que veo entre celebración y fiesta. Este montaje de gasto, consumo, buenos deseos, comilonas, vestidos de noche vieja, etc, ¿Responden realmente a una celebración, o sencillamente estamos montando una gran fiesta?. Quiero decir, en estas fechas y con los valores que empiezan a primar en nuestra sociedad, realmente, ¿Celebramos algo entorno a algún hecho, a algún acto, a alguien?. O, sencillamente montanos o nos montan todo este tinglado.
Posiblemente si pensásemos en el significado de la Navidad y como exteriorizar su celebración, nuestro comportamiento no seria el que habitualmente vivimos, y, aunque respeto a quienes sólo optan por vivir a tope esta macrofiesta, he de reconocer que me gusta cuando las fiestas son consecuencia de una celebración, en este caso el nacimiento de Jesús, ya que son autenticas, diferentes y tienen un regusto especial.
Ahí lo dejo...